Cómo si fuera el primer día

Inicié el servicio en agosto aunque no con el grado que quería, nimodo la subdirección no está tan mal, al menos estoy aprendiendo otras cosas, por ejemplo ya sé hablar con la gente, hacer oficios, peticiones, enojarme y estresarme de más.

En fin, después de casi dos meses de estar viendo los problemas de la escuela en sus diferentes grupos me decidí por segundo grado, ¿por qué? pues porque pienso que muchos de los problemas es porque no se resolvieron a tiempo, entonces no quiero que estos niños lleguen a tener más dificultades en un futuro, prefiero que aprendan a leer y escribir ahora y no pierdan el año. Además es como matar dos pájaros de un tiro (o tres), ya que no tuve la oportunidad de tener primer grado, ahora puedo "probar" que tan buena soy para enseñar a leer y escribir.

Y pues... bueno, ayer conocí a mis posibles niños. Son siete: Ana Rosa, Natalia, Carlos, Cecilio, Ángel, Misael y Andrés. Para conocerlos mejor y poder hacer mi taller los saqué una hora a trabajar al patio, haciendo alusión al día de muertos hicimos una máscara de calavera, cada uno la decoró a su gusto y en la frente pusieron su nombre (bueno los que sabían como se escribe), yo también hice la mía y durante el proceso les pregunte que cosas les gustaban. Son unos niños lindos, muy platicones y un poco distraídos, pero ya me las arreglaré.

Ya terminé mis referentes de las vocales y ya, me imagino que si no fuera tan ñoña no disfrutaría mi trabajo